Conversaciones difíciles
Estas reflexiones parten de los aprendizajes y programas de formación que Valentín Giró realiza como Consultor de Axialent, empresa creada por Fred Kofman especializada en el desarrollo del liderazgo y procesos de cambio cultural en las organizaciones. Fred Kofman es además el autor de Metamanagement y Conscious Business.
¿Qué es lo que hace que una conversación resulte difícil?
En toda conversación se dan tres dimensiones distintas; la operacional relativa a la tarea, la relacional y personal relativa al individuo. En una conversación difícil lo que suelen aflorar son dudas y desacuerdos y nos sentimos amenazados en estas tres dimensiones. Ante esta situación reaccionamos con actitudes defensivas que nos hacen ser arrogantes. Hagamos, a continuación, un breve repaso de lo que sucede en cada una de estas dimensiones en una conversación difícil:
- En el aspecto operacional, una conversación difícil conlleva desacuerdos sobre lo que sucede, sobre cuáles han sido las causas y sobre qué curso de acción es el más conveniente. Lo que realmente ocurre, sin embargo, es a menudo más complejo de lo que las partes perciben, ya que existen hechos relevantes no conocidos o pensamientos y sentimientos que no han sido expresados. A pesar de ello, cada interlocutor cree conocer al completo la situación e intenta demostrar al contrario que únicamente él tiene razón y que el otro está equivocado.
- En el plano relacional, en una conversación difícil están en juego los sentimientos y las opiniones recíprocas. Reaccionamos de forma defensiva ante la crítica y esto acaba por distanciarnos de la otra persona y nos invade la desilusión y el resentimiento.
- A nivel personal, en una conversación difícil percibimos que nuestra identidad y autoestima se encuentran en riesgo. Ante esta amenaza, reaccionamos protegiéndonos y atacando al otro, creyendo que “conocemos sus intenciones” e intentamos probar que sólo nosotros estamos en lo correcto. Para afrontar mejor una conversación difícil resulta necesario que corrijamos muchas de nuestras suposiciones y que desactivemos la “atribución negativa de intenciones”.