La espiritualidad como necesidad
Jorge Bucay nos presenta interesantes reflexiones en su libro «El camino de la espiritualidad«. De entrada, el autor nos ofrece una distinción de lo que considera que es la espiritualidad: «Podemos llamarla como sea, pero lo importante es que su núcleo está en todo aquello que somos más allá de lo que sentimos, más allá de lo que pensamos, más allá de lo que creemos y, por supuesto, mucho más allá de nuestro cuerpo y nuestras posesiones (…) si conectar con el alma es tocar la cima de la montaña, la llamada del espÃritu es una invitación a seguir subiendo«.
Abraham Maslow (1908-1970), psicólogo estadounidense conocido como uno de los principales exponentes de la psicologÃa humanista y creador de la denominada pirámide de las necesidades humanas, identificó claramente las necesidades del espÃritu y las ubicó en lo más alto de su célebre pirámide. En la base la misma, Maslow ubicó las necesidades primarias (alimento, techo y abrigo) y, sobre ellas, las necesidades sociales (seguridad e integración). Luego propuso las necesidades psicológicas (valoración y reconocimiento) y, en lo más alto de la pirámide colocó las necesidades del espÃritu. Para Maslow, todos los seres humanos tenemos una tendencia natural a buscar la autorrealización, es decir, necesitamos encontrarnos como individuos para definir asà el sentido de nuestras vidas.
Gracias a Maslow la psicologÃa descubrió que la salud también tiene sus «sÃntomas»: el optimismo, la alegrÃa y la subjetiva sensación de ser feliz.